Aprobado el proyecto de ley de patentes.
NOVEDADES
1. Moderniza la legislación para fomentar la innovación, el emprendimiento y la internacionalización de las empresas.
- El objeto principal es fortalecer el sistema español de patentes, al pasar de un marco en el que lo importante era fomentar la iniciativa de patentar a un nuevo marco en el que se quiere primar la actividad verdaderamente inventiva, innovadora y novedosa. Para ello, se pasa de patentes “débiles”, que generan a menudo burbujas tecnológicas, alta litigiosidad y monopolios injustificados, a patentes “fuertes”, comparables a las de los sistemas internacionales y países industrializados
- Se simplifican los procedimientos y se adapta la normativa al marco internacional de propiedad industrial, con lo que se favorece la internacionalización de las empresas.
- Por otro lado, se fomenta la iniciativa emprendedora mediante la reducción de un 50 por 100 de la tasa para la obtención de una patente para los emprendedores.
- Los modelos de utilidad, para invenciones menores, también se fortalecen. Se amplía su ámbito a los productos químicos y se modifica su régimen mediante el requisito de novedad mundial. Además, se garantiza su solidez mediante la exigencia del informe sobre el estado de la técnica prejudicial.
- Por último, se incluyen expresamente entre los títulos de protección los Certificados Complementarios de Protección, o CCP, título de propiedad industrial que extiende por un plazo máximo de cinco años la protección otorgada a una patente de un producto farmacéutico o fitosanitario, para compensar el mayor plazo de tiempo que transcurre para estos productos desde que se concede la patente hasta que se autoriza su comercialización.
- Beneficios del nuevo marco legal: La creación de una patente fuerte supone importantes beneficios:
• Para la competencia: evita monopolios injustificados, ya que no se dan la protección y el derecho de exclusividad que la patente supone, salvo que se justifique realmente la novedad y altura inventiva.
• Para los ciudadanos: se garantiza la seriedad de las patentes, y se simplifican los procedimientos, reduciendo las cargas administrativas.
• Para la Administración y los Tribunales: se evita la sobrecarga de la Administración al no tener que tramitar patentes de escasa calidad técnica, y de los Tribunales, ya que no se otorgarán monopolios injustificados.
• Para la imagen de la patente española, que se fortalece y equipara a los sistemas de propiedad industrial más avanzados.
• Otro de los beneficios de la nueva Ley de Patentes tiene que ver con la seguridad jurídica, ya que se aclara el marco normativo, al adecuarlo a las novedades técnicas y adaptarlo al nuevo marco internacional.
• Por último, se incentiva la protección de la innovación por parte de Pymes y emprendedores, al disminuir el coste del procedimiento para obtener una patente.